Arco de Tito

En nuestro viaje visitaremos hoy el foro romano y haremos una parada en el Arco de Tito.

En Roma se construyeron los arcos de triunfo para conmemorar una batalla o una entrada triunfal de un emperador, un general o un cónsul entre otros grandes dignatarios y fueron realizados como elementos urbanísticos propagandísticos que servían para engrandecer y llenar de gloria a un imperio que crecía y conquistaba grandes y vastos territorios.

El Arco de Tito es un arco de triunfo situado frente al Coliseo romano, ubicado en la parte superior de la Vía Sacra Summa y que en tiempos romanos unía el Palatino con la Velia.

El Arco de Tito hoy en día da acceso al foro romano y se construyó en el año 81 para conmemorar el triunfo del emperador Tito sobre los judíos y es por ello, por lo que nos muestra en el interior un relieve histórico que narra el expolio del candelabro de los siete brazos y el desfile de carros y tropas romanas.

Es un arco de mármol, de un único vano, donde se utiliza el hormigón (nuevo elemento constructivo rápido y barato) recubierto con placas de mármol, y se combinan la estructura adintelada y la aboveda, con un arco de medio punto y una bóveda de cañón decorada con casetones que equilibra el estatismo de la obra.

El arco está situado sobre un pódium y coronado con un ático, donde podemos leer en su cartela “el Senado y el pueblo romano dedican el arco a Divo Tito Vespasiano Augusto”.

A ambos lados del arco, en el cuerpo principal, dos pilares flanqueados por columnas de orden compuesto (volutas y hojas de acanto) y sobre éste, en las enjutas, dos victorias aladas coronando el arco, y en el centro del arco, situado justo en la clave, la figura del emperador que va a ser tocado por las victorias de las enjutas, con la corona de laurel símbolo del triunfo.

Arco de Tito en el foro romano
Arco de Tito en el foro romano
Enjutas con las figuras de las victorias coronando al emperador
Enjutas con las figuras de las victorias coronando al emperador
Cartela con la frase dedicada al Emperador “el Senado y el pueblo romano dedican el arco a Divo Tito Vespasiano Augusto”
Cartela con la frase dedicada al Emperador “el Senado y el pueblo romano dedican el arco a Divo Tito Vespasiano Augusto”

Referente al relieve histórico los romanos gustaban de plasmar los acontecimientos históricos en sus construcciones propagandísticas y conmemorar los triunfos del guerrero y el deseo de darles eternidad en la piedra.

El artista romano toma como referencia la huella helenística griega, inspirando sus relieves históricos en relieves griegos como los del friso de las Panteneas de Fidias, situados en el Partenón o el altar de Zeus de Pérgamo, sin embargo, tiene su propio gusto a la hora de realizar sus relieves, como son el uso de la perspectiva, el uso de personajes situados en distintos planos, o la introducción de elementos paisajísticos, sobre todo usados estos caracteres durante la época Imperial para para conmemorar e inmortalizar la grandeza del emperador.

El Arco de Tito nos narra el desfile de carros y tropas y la entrada de las tropas romanas a la ciudad de Jerusalén y el expolio del candelabro de siete brazos del templo de Salomón, donde podemos apreciar el júbilo con el trasladado por las tropas, con el uso de un delicado efecto de aire interpuesto de sus personajes y la ilusión y el realismo en el espacio.

El Arco de Tito nos narra el desfile de carros y tropas y la entrada de las tropas romanas a la ciudad de Jerusalén y el expolio del candelabro de siete brazos del templo de Salomón
Desfile de carros y tropas romanas
El Arco de Tito nos narra el expolio del candelabro de siete brazos del templo de Salomón, donde podemos apreciar el júbilo con el trasladado por las tropas
Expolio del candelabro de los siete brazos del templo de Salomón

SABÍAS QUE… tanto el Anfiteatro Flavio, más conocido como Coliseo y el propio arco de Tito fueron construido con los restos de materiales expoliados del templo de Salomón, este dato lo conocemos, ya que en el interior del Coliseo se pudo encontrar un epígrafe que decía “el Emperador Vespasiano César Augusto erigió el nuevo anfiteatro con el producto del botín”.

Y sabías que durante mucho tiempo el pueblo judío no quería pasar por debajo del arco, ni mirar hacia él, ya que sentían que el pasar ensalzaban a los guerreros romanos que contribuyeron al expolio del símbolo sagrado para el judío, la menorá o candelabro de los siete brazos.